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La apicultura, aliada del urogallo

Fecha: 
Viernes, 30 Mayo, 2014
La apicultura, aliada del urogallo

La Asociación Profesional de Agentes Forestales y Medioambientales de León (APAFLE) desarrolla un proyecto de custodia del territorio en el marco del LIFE+ Urogallo cantábrico

APAFLE pone en marcha el proyecto “Polinización en hábitat de urogallo”, dirigido a mejorar la polinización y la productividad de varias especies de ericáceas, entre las que destaca el arándano (Vaccinium myrtillus), mediante la instalación de colmenares móviles en los montes públicos de los municipios de Burón y Oseja de Sajambre, en la provincia de León.
 
El proyecto de APAFLE se enmarca en el programa de custodia del territorio del LIFE+ Urogallo cantábrico, que pretende promover acuerdos voluntarios entre propietarios y entidades de custodia en fincas que tienen un interés especial para la conservación del urogallo cantábrico y su entorno.
 
Para ello, APAFLE ha firmado dos acuerdos de custodia con la Junta Vecinal de Burón y con el Ayuntamiento de Oseja de Sajambre, entidades propietarias de los montes de utilidad pública donde se instalarán los colmenares móviles, para favorecer la polinización de las arandaneras.
 
La alimentación del urogallo
El objetivo principal de este proyecto es incrementar la cantidad y la productividad de los frutos del arándano a través de la polinización zoófila. Las arandaneras forestales y supraforestales representan un componente fundamental del hábitat para el urogallo, tanto que la producción de sus frutos está relacionada con el éxito de supervivencia de esta subespecie en peligro de extinción. El urogallo, en su primera etapa de vida, basa su dieta en arácnidos, insectos y orugas (lepidópteros) presentes en las ericáceas, especialmente en el arándano. Con el tiempo su dieta se hace más variada, incorporando componentes vegetales hasta llegar a su etapa adulta, en la que es principalmente folívoro, consumiendo yemas, frutos y hojas de distintas especies tanto arbustivas como arbóreas.
 
La polinización zoófila
Entre todos los insectos que participan en el proceso de polinización, la abeja (Apis mellifera) es la más eficaz. Las abejas llegan a constituir el 95% del total de insectos polinizadores que visitan las flores, debido al retroceso que han experimentado las otras especies polinizadoras silvestres, a causa del uso de contaminantes y del las condiciones ambientales desfavorables.
 
En las áreas de montaña de León, la apicultura representaba una actividad tradicional, con colmenares de medianas dimensiones, destinados principalmente a la producción de miel para el consumo familiar de cada año. Actualmente, la mayoría de las instalaciones tradicionales ha sido abandonada, debido, en muchos casos, a la proliferación de las enfermedades de las abejas, que ocasionaban grandes pérdidas de efectivos en las colonias, reduciendo la producción de miel.
 
APAFLE, con la colaboración y asesoramiento de la Fundación Tierra Ibérica y de Miel Yordas-Riaño, desarrolla este proyecto de custodia del territorio para favorecer la recuperación del urogallo cantábrico, mejorar el estado de conservación de su hábitat e impulsar la apicultura tradicional de montaña como fuente de biodiversidad.