Descripción: la situación crítica en la que se encuentra la población de urogallo cantábrico hace urgente la aplicación de medidas de conservación que favorezcan un incremento del hábitat óptimo para la subespecie.

Entre las acciones a realizar destacan:

- Aperturas y mantenimiento de claros, para favorecer el desarrollo y fructificación del arándano, especie clave en la alimentación del urogallo cantábrico.

- Clareos y claras, para favorecer la evolución de las masas forestales (robledales, hayedos) hacia estados más maduros, con una estructura más adecuada para los distintos momentos del ciclo vital de la subespecie.

- Liberación o fomento de especies vegetales de interés para el urogallo, productoras de frutos carnosos o que mantienen follaje verde en la época invernal (como el roble y el acebo).

- Plantaciones de enriquecimiento de especies de interés para el urogallo (acebo, tejo, serbal y mostajo).

- Mejora de la conectividad para favorecer la continuidad de la superficie arbolada y la comunicación entre núcleos aislados de la subespecie.

- Mejora de la estructura de las orlas forestales, a través de desbroces selectivos, para crear un mosaico adecuado de brezo y arándano y mejorar el hábitat de cría de la subespecie.

Las actuaciones siguen las directrices del Documento técnico sobre la conservación y mejora del hábitat del urogallo cantábrico, resultado de la acción preparatoria A.1.