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La subestación eléctrica del Puerto de Panderruedas reduce hasta cuatro veces su nivel sonoro para proteger al urogallo cantábrico

Fecha: 
venres, 25 Setembro, 2015
Subestación eléctrica del Puerto de Panderruedas tras los trabajos de apantallamiento acústico

Los trabajos desarrollados en el marco del proyecto LIFE+ Urogallo cantábrico han logrado reducir hasta cuatro veces el nivel sonoro de la subestación eléctrica del Puerto de Panderruedas (León). En este proyecto, que coordina la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, ya se han finalizado las actuaciones para proteger a la especie del impacto acústico de la subestación transformadora.
 
Para ello, se han instalado pantallas acústicas en el perímetro exterior de la subestación eléctrica. Los trabajos han permitido reducir el ruido hasta los 50 dBA, un nivel sonoro bajo, equivalente al sonido de una nevera en buen estado.
 
La subestación transformadora está situada en el paraje conocido como Collado la Vieja, próximo al Puerto de Panderruedas, en la Zona de Protección Especial para las Aves (ZEPA) Picos de Europa Castilla y León. Se trata de un área ventosa, por lo que la altura de las pantallas metálicas no supera los dos metros.
 
Esta acción, ejecutada por el Consorcio Interautonómico para la gestión integrada del Parque Nacional de Picos de Europa, forma parte de las actuaciones del proyecto destinadas a minimizar el riesgo de electrocución, el ruido y las molestias que ocasionan las infraestructuras eléctricas al urogallo cantábrico.
 
En 2014, se lograron aislar los elementos en tensión de la subestación transformadora de Collado la Vieja, construida hace más de 20 años con el fin de mitigar el impacto de la línea eléctrica al salir del valle. La instalación de protecciones de avifauna en la parte de baja tensión del transformador permitió reducir el riesgo de electrocución.
 
La subestación transformadora pertenece a la empresa Navarro, que ha colaborado desde el inicio en todas acciones de corrección de infraestructuras eléctricas para la conservación del urogallo cantábrico.
 
Las actuaciones enmarcadas en el LIFE+ Urogallo cantábrico han permitido proteger al urogallo cantábrico del riesgo de mortalidad por electrocución en la zona de Collado la Vieja y por tanto, mejorar el hábitat del urogallo en la ZEPA Picos de Europa.
 
Actuaciones previas
 
Por el territorio de Picos de Europa discurren 86 kilómetros de tendidos eléctricos que pertenecen a diversas compañías. En la actualidad, más del 50% de estas infraestructuras han sido señalizadas o corregidas.
 
Para contribuir a la conservación del urogallo cantábrico, Iberdrola y la empresa Navarro han llevado a cabo diversas medidas de protección. Por un lado, Iberdrola colaboró en 2003 en la señalización con salvapájaros de un tramo de 4 km de líneas eléctricas en el Valle de Valdeón con el fin de aumentar la visibilidad y evitar la colisión de aves. A esta acción, se suma el soterramiento de 2 km de línea aérea y diversos trabajos ejecutados entre 2010 y 2012 para la mejora de la línea que da energía al valle y que cruza zonas urogalleras.  Por su parte, la empresa Navarro señalizó en 2005 una línea de alta tensión de 12 km.
 
Todas estas medidas han supuesto una mejora del área crítica del urogallo, declarada en esta zona. En total, se han instalado salvapájaros en 20 km para reducir o eliminar el riesgo de colisión de aves, se han soterrado 2 km de líneas aéreas y se ha cambiado la ubicación del Centro de Transformación de Intemperie de Panderruedas a un lugar menos visible y se han enterrado los cables para eliminar el riesgo de electrocución.
 
El LIFE+ Urogallo cantábrico, coordinado por la Fundación Biodiversidad, tiene como objetivo fundamental frenar el declive de esta subespecie exclusiva del noroeste de la Península Ibérica y fomentar su recuperación. El proyecto, cofinanciado al 50% través del programa LIFE+, instrumento financiero de la Unión Europea para el medio ambiente, cuenta como socios con las comunidades autónomas de Cantabria, Principado de Asturias y Castilla y León, esta última a través de la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León; el Consorcio Interautonómico para la Gestión Coordinada del Parque Nacional de los Picos de Europa; Tragsa y Tragsatec, SEO/BirdLife y con la financiación del Organismo Autónomo Parques Nacionales y la Fundación Iberdrola España.