Diversos medios de comunicación, acompañados de los socios del  proyecto LIFE+ Urogallo cantábrico, han visitado las acciones que se han llevado a cabo en el Parque Nacional de los Picos de Europa (PNPE). Los periodistas han conocido las actuaciones para mejorar el hábitat de la vertiente oriental de la cordillera Cantábrica, donde la presencia de esta subespecie se encuentra en una situación más crítica.

La Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que coordina el LIFE+ Urogallo cantábrico, ha participado en la jornada junto con los socios del proyecto.

En la oficina administrativa del PNPE en Posada de Valdeón, el director del proyecto y subdirector de la Fundación Biodiversidad, Ignacio Torres, ha destacado las medidas urgentes de conservación puestas en marcha en el marco del LIFE+ Urogallo cantábrico. Torres ha incidido en el que el urogallo es una especie presa y “no tiene el viento a su favor”. Las causas de su declive son múltiples e interrelacionadas entre sí. Ante esta situación, administraciones, la sociedad civil y el sector empresarial, representado por la Fundación Iberdrola España, “están en el mismo barco” para frenar el declive de esta subespecie endémica de la cordillera Cantábrica. 

Torres ha recordado que la batería de acciones urgentes se centra en la mejora del hábitat, la cría en cautividad y el reforzamiento de la población, así como en la participación social y la sensibilización. Estas acciones se han hecho contando con unos protocolos de actuación consensuados y con el asesoramiento de un amplio comité científico. En gestión de hábitat, el codirector del PNPE por Castilla y León, Mariano Torre, ha señalado que desde la ejecución del LIFE+ Urogallo cantábrico “los tratamientos selvícolas que se llevan a cabo en el PNPE  siguen criterios de conservación de fauna”.

En esta línea, durante la visita se han mostrado diversas de las actuaciones realizadas para favorecer el entorno del urogallo cantábrico, donde el arándano constituye la piedra angular de su alimentación.

La importancia del arándano

El coordinador del proyecto sobre el terreno de la Fundación Biodiversidad, Luis Robles, ha explicado la importancia de las arandaneras, cuyo fruto, hojas y brotes sustentan al urogallo. Además, albergan insectos que alimentan a los pollos durante las primeras semanas de cría.  Sin embargo, su calidad se ha visto deteriorada por el ramoneo de ciervos y otros herbívoros. Para evaluar su impacto, se han instalado parcelas que protegen las arandaneras. El delegado de SEO/Birdlife en Cantabria, Felipe González, ha destacado que “ya se puede observar la diferencia en aquellas en las que el ciervo no ha tenido acceso”.

Entre las amenazas del urogallo cantábrico en Picos de Europa también se encuentran algunos vallados ganaderos peligrosos, que se han señalizado para evitar el impacto de los gallos, e infraestructuras eléctricas como la subestación eléctrica del Puerto de Panderruedas, en la que se han hecho actuaciones para reducir cuatro veces su ruido y el riesgo de electrocución. 

 Durante el recorrido, los participantes en la jornada han podido conocer acciones que han contado con la participación de la población local. Es el caso del proyecto de custodia del territorio de la Asociación Profesional de Agentes Forestales y Medioambientales de León, que han instalado colmenares móviles para uso de los vecinos de la zona. Esta acción contribuye a la polinización del arándano y otras especies de interés para el urogallo.

 Por último, los periodistas han visitado el parque de suelta, que albergaron a las tres hembras de urogallo cantábrico procedentes del centro de cría de Sobrescobio liberadas en 2014. El veterinario del centro de cría, Ramón Balsera, y el técnico de la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y Léon, Daniel Pinto, han explicado que estas instalaciones sirvieron para aclimatar a los ejemplares antes de su liberación.

 Esta jornada forma parte de las acciones de sensibilización y comunicación del LIFE+ Urogallo cantábrico, que está cofinanciado al 50% por la Unión Europea a través de los fondos LIFE+. El proyecto, que está coordinado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, cuenta como socios con las comunidades autónomas de Cantabria, Principado de Asturias y Castilla y León, esta última a través de la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León; el Consorcio Interautonómico para la gestión coordinada del Parque Nacional de los Picos de Europa; SEO/BirdLife y Tragsa y Tragtasec y con la cofinanciación del Organismo Autónomo Parques Nacionales y la Fundación Iberdrola España.

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